Ayer se estrenó un formato muy interesante en el programa "Tengo una pregunta para usted", en el que ciudadanos pudieron realizar preguntas a Zapatero. La gran audiencia del programa llegando a pasar de los 7 millones de espectadores en algunos momentos, teniendo en cuenta que competía contra Los Serrano y House, hace ver que el programa interesa. Y es que tener a los políticos, habitualmente tan lejanos, cerca para preguntarle sobre lo que realmente nos importa, fuera de los típicos rifirafes en busca de votos, es interesante. Zapatero en mi opinión estubo aceptable, muy lejos de sacar buena nota. Es una manera de hacer nueva política, de acercarnos la política, y acercar a los políticos a nuestros problemas, una gran oportunidad para mejorar una democracia, que necesita nuevos impulsos. Tal vez el Presidente se refugió demasiado en las cifras de despacho, manteniendo las distancias, y con la anécdota del café, que es lo único que ha interesado a los mass media. Y es que así son los grandes medios, se quedan con la tontería, como habitualmente, para no hacernos pensar sobre lo demás. Bien es verdad que Zapatero muestra cercanía con la gente, pero le falta el toque preciso para destacar. Claro está que tiene más carisma que Rajoy, pero aún le queda mucho para llegar a Adolfo Suarez o Felipe González. Una buena idea televisiva, útil, y que intenta un cambio, pero que muestra que todavía hay mucha distancia que salvar entre la política de pasillo y la calle.